Por: Julia Tavarez
Exhaustivo refuerzo de la normativa, fortalecimiento de los procesos, y rigor a las partes involucradas.
El presidente de los Estados Unidos de Norteamérica, Donald Trump, desde su juramentación tal y como prometió durante su campaña electoral, inició la operación de deportación más grande en la historia de EE.UU., declarando de emergencia nacional la frontera sur para desplegar personal militar y terminar el muro fronterizo. Conjuntamente, puso fin al uso de la aplicación CBP ONE, una herramienta digital en donde los inmigrantes luego de registrarse y agotar el proceso podían ingresar a EE.UU., e inició el proceso para poner fin a la ciudadanía por nacimiento.
En 2025, Trump dispuso más de cien Órdenes Ejecutivas, algunas de ellas, con impacto directo e indirecto en la migración, con fuerte énfasis en la seguridad nacional.
En el transcurso de los meses las medidas han estado enfocadas en frenar la inmigración ilegal, pausar y dilatar trámites migratorios, aumentar deportaciones y restringir el Asilo.
Medidas implementadas en 2025
Cada acción a ejecutar por las agencias gubernamentales tiene fuente en las Órdenes Ejecutivas. En enero, firmó decretos para la protección contra la invasión, declarar emergencia nacional la frontera sur y reorganizar el programa de refugiados.
La detención y deportación ha sido acelerada para los inmigrantes sin documentos, con énfasis en aquellos con órdenes finales de deportación.
El presidente Trump también ha intentado ponerle fin a la ciudadanía por nacimiento, siendo esta examinada por la Corte Suprema, la cual tendrá la última palabra en 2026 y es posible que emita una decisión a finales de junio.
El Estatus de Protección Temporal (TPS), fue afectado en noviembre para 250.000 venezolanos beneficiados en 2021 y antes se terminó para otros 350.000 venezolanos que accedieron al programa en 2023. También, afectados con esta medida Afganistán, Camerún, Nepal, Honduras, Nicaragua y Siria.
El Parole in Place, un programa humanitario temporal del Gobierno de Joe Biden, llegó su fin en marzo de este año, dejando sin estatus a medio millón de migrantes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela.
A finales de noviembre, el gobierno pausó todas las gestiones procesales de Asilo para personas de 19 países de preocupación, incluidos Afganistán, Myanmar, Chad, República del Congo, Guinea Ecuatorial, Eritrea, Haití, Irán, Libia, Somalia, Sudán, Yemen, Burundi, Cuba, Laos, Sierra Leona, Togo, Turkmenistán y Venezuela.
Además, las autoridades anunciaron reevaluación en todas las tarjetas de residencia emitidas a personas de los 19 países enlistados anteriormente luego del tiroteo en la ciudad de Washington en noviembre que dejó una miembro de la Guardia Nacional fallecida y otro más herido, además, de la detención de los exámenes y juramentación de ciudadanía para estos inmigrantes.
Este año, trajo consigo el registro nacional de inmigrantes, un requisito para que se registren ante el gobierno, dependiendo el tiempo de estadía.
Las restricciones de beneficios impiden el acceso a indocumentados a programas de becas estudiantiles y ayudas alimentarias.
En estos últimos meses, se ha ampliado las prohibiciones de viaje, con restricciones de entrada a ciudadanos de ciertos países. Y se espera la implementación de nuevas limitaciones o condiciones de salida para los residentes en 2026.
La vida y rutina de los inmigrantes queda marcada en 2025. Lo que antes podía ser, posiblemente ya no proceda, porque horas antes fue emitida una Orden Ejecutiva que cambia la regla migratoria.
De acuerdo a una encuesta del Pew Research Center resalta que el 42% de los hispanos en EE.UU. temen que ellos o un ser querido puedan ser deportados. Uno de cada 25 adultos lleva consigo documentos que prueben su estatus migratorio y 1 de cada 50 evitó usar servicios públicos como atención médica o contacto con autoridades.
LA DEPORTACIÓN EN NÚMEROS
Aproximadamente 200.000 inmigrantes ha sido deportados en los primeros 10 meses del segundo gobierno de Donald Trump, según cifras recopiladas por CNN, y por primera vez en 50 años la población inmigrante disminuyó en casi 1,5 millones de personas entre enero y junio, señaló un análisis del Pew Research Center.
Más de 2.5 millones de extranjeros habían abandonado Estados Unidos, según El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés). Eso incluye, afirma el departamento, más de 605,000 deportaciones y casi dos millones de personas que han recurrido a la auto deportación.
Porque sí señores, en este año que casi despedimos, muchos o cientos prefirieron regresar a sus países de origen, eligiendo el camino de regreso de manera voluntaria.
OTROS DATOS DE IMPACTO
El DHS afirma que ha deportado a más de 500.000 inmigrantes indocumentados desde el inicio del segundo mandato de Trump.
El Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS, por sus siglas en inglés), también suspendió este mes las solicitudes de inmigración de personas de 19 países, según un memorando de política, citando preocupaciones de seguridad nacional para implementar su agenda inmigratoria.
PROYECTOS A FUTURO
Deportación masiva: Planes para deportar hasta 25 millones de personas, priorizando a quienes tienen órdenes de deportación.
Endurecimiento de la aplicación de ley: Incremento de redadas, arrestos y detenciones por parte de ICE y CBP.
Reactivación de «Quédate en México»: Reimplementación de los Protocolos de Protección a Migrantes (MPP).
Según afirman las autoridades estadounidenses, estas medidas buscan restaurar la integridad del sistema migratorio y priorizar la seguridad nacional.
NUEVA EMBAJADORA EN RD
En nuestro país, este año recibimos y saludamos a la nueva Embajadora de los Estados Unidos en República Dominicana, quien llegó al país en octubre. Leah Francis Campos, nominada por el presidente Donald Trump es la tercera mujer en ocupar el cargo de embajadora y asume la responsabilidad de fortalecer los vínculos bilaterales entre ambas naciones.
Sin duda, que nuestro país continúa fortaleciendo su liderazgo en la Región, se posiciona con respeto ante la mirada del mundo y estrecha su relación con la Gran Nación Norteamericana.
Además, recibimos el nuevo Cónsul General quien llegó en julio, y tendrá la responsabilidad de liderar la Sección Consular con casi treinta años de experiencia. Ambas designaciones son un logro importante en la diplomacia.
PERMANECER O REGRESAR, DE MANERA LEGAL
Lo cierto es que estamos en medio de cambios constantes y rigurosos de la política migratoria estadounidense. El tiempo adquiere valor en cuanto a la preparación de los casos y gestión de los procesos porque, para permanecer o llegar en USA cada inmigrante requiere una decisión de las agencias del gobierno que repercuta en la vida propia, en la familia.
Podríamos afirmar que asistimos a un nuevo modelo de administración pública, con nueva visión y estrategia de cuido y protección a través de un exhaustivo refuerzo de la normativa, fortalecimiento de los procesos, y da rigor a las partes involucradas.
Otorga valor a lo correcto y obliga a evaluar de manera directa y profunda cada proyecto, no solo migratorio, también, económico y de futuro.
